La coordinadora en Haití de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ulrika Richardson, condenó este viernes el secuestro del director general del Laboratorio Nacional, Jacques Boncy, también baleado y luego liberado como parte de la creciente ola de violencia que viven los haitianos.
Richardson informó del ataque contra el médico en la noche del 5 de abril y lo catalogó como “el último de una larga secuencia de actos de violencia contra trabajadores sanitarios, educativos y humanitarios y sus bienes en Haití desde principios de año”.
La funcionaria de la ONU también destacó que “el respeto del personal médico, educativo y humanitario es esencial y cualquier ataque contra ellos viola las normas humanitarias mínimas que todas las personas deben cumplir”.
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