La noche de este sábado al domingo, las Fuerzas Armadas de Rusia atacaron un aeródromo situado en la región ucraniana de Kiev, informó el Ministerio de Defensa ruso. Además, derribaron dos aviones ucranianos y destruyeron decenas de drones y otro equipamiento militar.
De acuerdo con un comunicado de Defensa, las fuerzas rusas "llevaron a cabo un ataque con armas de alta precisión de largo alcance desde el aire" contra el aeródromo. "El objetivo del ataque ha sido alcanzado, todos los objetivos designados han sido destruidos", afirmó.
Además, en la provincia rusa de Zaporozhie, parte de la cual todavía está controlada por el régimen de Kiev, cazas rusos derribaron un helicóptero Mi-8 del Ejército ucraniano, mientras que sistemas de defensa antiaérea abatieron dos aviones de ataque Su-25. También fueron destruidos 30 drones ucranianos en las provincias de Zaporozhie, Jersón, Lugansk y Donetsk.
Se señala que, durante la jornada, las tropas rusas repelieron 11 ataques de las unidades de asalto ucranianas e interceptaron nueve cohetes disparados mediante el sistema lanzacohetes múltiple HIMARS de fabricación estadounidense. Durante este período, las pérdidas del régimen de Kiev ascendieron a unos 800 militares.
Entre otros equipos destruidos también figuran un tanque, más de una decena de vehículos blindados de combate, varios sistemas de artillería M777 de fabricación estadounidense, varios obuses, así como un depósito de municiones, entre otros.
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